Para hacer la pintura, cortamos hojas de tuna en rebanadas y las dejamos en remojo por 48hs. Luego de ese tiempo, el agua se convierte en una especie de jarabe, bastante viscoso.
A esa agua de tuna, se le agregó engrudo, leche en polvo, arcilla caolín (blanca), un poco de arena fina y aceite de lino. El resultado no tiene nada que envidiarle al mejor látex al agua, y es mucho más económica, ecológica y cumple con las mismas propiedades que el barro (permite que el barro "respire").
Le dimos una mano a todas las paredes, y luego agregamos una segunda mano con algo de pigmento ferrite amarillo.
Luego limpiamos todo, troncos, zócalos y pisos. Arreglamos retoques y listo!! Las paredes están terminadas en su totalidad!!
Sólo falta terminar la sección cocina y ya estaría terminado el interior...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario